21 de agosto de 2015
El 17 de agosto de 2015 la periodista y defensora de derechos humanos Elizabeth Zúñiga denunció públicamente sabotaje a su vehículo, un acto que posiblemente tenía fin de matarla.
Elizabeth Zúñiga es una periodista quien había trabajado en colaboración con el defensor de derechos humanos, Héctor Orlando Martínez Motiño, quien fue asesinado el 17 de junio del 2015. Héctor Orlando Martínez Motiño fue presidente de la sección 6 del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras – SITRAUNAH. Juntos
estaban trabajando 34 casos de violaciones de derechos humanos,
inclusive algunos relacionados al personel de la universidad, siendo
Elizabeth Zúñiga ahora la única persona con información en dichos casos.
El
12 de agosto de 2015, Elizabeth Zúñiga se dio cuenta que su vehículo
estaba emitiendo ruidos extraños después de haberlo recogido del
estacionamiento de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, lo cual
cuenta con vigilancia privada. Grabó los ruidos pero seguía usando el
automóvil durante los tres días siguientes. El 15 de agosto de 2015, la
defensora de derechos humanos llevó el automóvil a ser revisado por un
mecánico. Tras inspeccionar su vehículo, el mecánico le informó que
tenía tres tuercas de la llanta delantera izquierda flojas, hecho que
fácilmente pudiera haber provocado un accidente grave. Durante el mismo
periodo, la madre de Elizabeth Zúñiga también recibió una llamada en la
cual le dieron “Digale a su hija que se calle ya, sino se le dará en lo que más le duele”.
Este
incidente es sumamente preocupante, dado que el vehículo de Héctor
Orlando Martínez Motiño sufrió sabotaje del mismo estilo algunos meses
antes de que fuera asesinado. Front Line Defenders publicó una acción urgente en cuanto a la intimidación hacía la abogada trabajando en su caso, Reina Lilian Rodríguez.
Desde el asesinato de Héctor Orlando Martínez Motiño, no han habido
avances en el caso, hecho que crea un clima de impunidad que facilita
este tipo de intimidación y acoso hacía defensores de derechos humanos.
Front
Line Defenders está extremadamente preocupado por la seguridad de
Elizabeth Zúñiga, dado que es probable que esté siendo vigilada y está
siendo sometida a un patrón de intimidación similar al que precedió el
asesinato de un defensor de derechos humanos.
Front Line Defenders insta a las autoridades hondureñas a que:
1. Tomen todas las medidas necesarias para garantizar en todo momento la integridad física y psicológica de Elizabeth Zúñiga;
2. Inicien
una investigación inmediata, exhaustiva e imparcial sobre el asesinato
de Héctor Orlando Martínez Motiño, con el fin de identificar a los
responsables, con el fin de llevarlos a la justicia conforme con los
estándares internacionales;
3. Tomen todas las medidas necesarias para garantizar en todo momento la integridad física y psicológica de Reina Lilian Rodríguez;
4. Aseguren
que todos los defensores y defensoras de derechos humanos en Honduras,
en el desarrollo de sus actividades legítimas en defensa de los derechos
humanos, puedan operar libremente sin miedo a restricciones ni
represalias.