martes, 26 de julio de 2016

La UNAH, territorio recuperado por la voz del Movimiento Estudiantil Universitario.



 “No existe, en realidad, arte por el arte, ni arte que esté por encima de las clases, ni arte que se desarrolle al margen de la política o sea independiente de ella” Mao Tse-tung
Carolina Torres

La forma de la lucha estudiantil en Honduras como en Latinoamérica se ha destacado por ser una expresión de rebeldía, alegría, combatividad y arte; es por ello que no es extraño que cuando  hacemos referencia al Movimiento Estudiantil Universitario tengamos que hablar sobre las diferentes expresiones de arte que se han dado en las manifestaciones y espacios de territorio recuperado dentro de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras.


Hacer un recorrido por lo que las y los estudiantes llaman el territorio recuperado de la universidad del pueblo, es caminar entre los murales que diferentes compañeros y compañeras han elaborado entre las plazas y edificios de la UNAH, es encontrarse en dichos murales con un par de ojos enmascarados representando uno de los lemas del MEU: “Nos tapamos el rostro para que vean corazones” y por desgracia es debido a la criminalización a la que el sector estudiantil se enfrenta cuando las autoridades universitarias logran identificarles, la capucha se ha convertido en esta coyuntura en el símbolo de lucha del estudiantado y en un grito de unidad vuelto propuesta.

Durante más de tres semanas los edificios en ciudad universitaria han sido recuperados por el sector estudiantil en una exigencia por la democratización en la UNAH, se han realizado diferentes conciertos a todas horas en las plazas, bajo edificios, en todo espacio donde la alegría es posible, las exigencias son cantos de esperanza de que “si nos organizamos podemos todo” y basta escuchar dicha consigna a un solo grito entre todas las asociaciones de carrera, asociaciones de facultad y movimientos estudiantiles independientes que aglutinan lo que es el MEU para contagiarse de la seguridad de la pronta victoria de las y los estudiantes.

La poesía también ha sido participe de las voces del estudiantado en estos momentos de enfrentamiento contra el autoritarismo de quienes mantenían secuestrada la casa de estudio del pueblo, dichas autoridades se muestran incapaces de doblegar a un movimiento estudiantil unido a nivel nacional que hace uso de pintura, colores, lápices, instrumentos musicales, tizas, papel, voces, unidad y alegría a pesar de las amenazas, intimidaciones y criminalización a la que hoy se enfrentan. 
 
 
“Amigo camisa blanca, sé que te mi capucha te espanta, pero con ella me identifico y mis ánimos se levantan.
Amigo camisa blanca, a mí no me ofende mi capucha, ella es símbolo de mi lucha, a  través de ella se me expreso y se me escucha.
Amigo camisa blanca, sé que quieres clases y yo también las quiero, pero tú piensas en tu educación primero, mientras yo pienso en el país entero.
Amigo camisa blanca, aprecio que respetes mi decisión, pero no voy a soltar ninguna instalación, hasta no lograr completarla misión: la derogación, la liberación y la participación.”