Las comunidades, siendo sabedoras de
que constitucionalmente la soberanía corresponde al pueblo del cual emanan
todos los poderes del Estado que se ejercen por representación (Artículo 2 constitucional), y reconociendo que la misma
Constitución de la República en los artículos 294 y 295 establece que las
municipalidades son autónomas e independientes, en relación a las demás autoridades
y poderes del Estado, no vacilaron en hacer uso de sus derechos y procedieron a
demandar de la Corporación Municipal la siguiente proclamación:
A. Declarar el territorio del municipio
de San Francisco, Atlántida, como zona productora de agua para consumo de los
humanos que habitamos en él.
B. improbar y dejar sin ningún valor y
efecto cualquier decisión, de cualquier entidad local, regional o nacional del Gobierno
de Honduras que pretenda o haya
pretendido concesionar las aguas, minerales, bosques y cualquier otro bien
natural del municipio, con fines mercantiles o comerciales.
C. Rechazar cualquier petición actual
que estuviera orientada a obtener permiso/autorización del gobierno local para explorar
o explotar el agua, los minerales o los bosques de este municipio con fines
comerciales o mercantiles.
D. Esta decisión es de carácter
permanente y perpetuo en absoluto respeto al poder soberano del pueblo del
municipio de San Francisco, Atlántida.
E. Notificar estos mandatos a las instituciones estatales y empresas particulares a quienes pudieran impactar o interesar, a
efecto de que procedan a acatarlos y a cumplirlos.
F. Esta Asamblea, a través de sus
distintas instancias organizativas, asume el cumplimiento de estos mandatos en
los distintos espacios, ya sea a través de acciones ante y en contra de instituciones estatales que pretendan
contravenir esta decisión o contra sociedades mercantiles que conociendo de la
ilegitimidad de sus pretensiones, insistan en entrar a explorar o explotar la
riqueza natural de nuestro municipio.
G. Esta Asamblea también asume su legítimo
derecho de defender directamente el territorio del municipio, incluso, expulsando
a cualquier empresa, maquinaria, empleados y toda persona que pretenda
contravenir estos mandatos.
Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia (MADJ)