Reunidas 300 mujeres Garifunas
representantes de 40 comunidades en la Asamblea Nacional, desarrollada
en la comunidad de Vallecito, los días 5 y 6 de mayo del 2018. Después
de un amplio debate sobre la problemática general de nuestro pueblo y en
particular de las mujeres Garifunas, MANIFESTAMOS:
Denunciamos la
criminalización y persecución judicial a la cual nos vemos expuestas las
mujeres Garífunas, defensoras del territorio ancestral de nuestro
pueblo, el que a los 221 años de presencia en Honduras enfrentamos una
nueva expulsión.
Señalamos que las Zonas de
Empleo y Desarrollo Económicas (ZEDE) conocidas también como “ciudades
modelo”, que después de varios años de ser promovidas por las
administraciones Lobo - Hernández, fueron resucitadas por la consultora
Mckinsey como parte de la plataforma de reelección; se han convertido en
una severa amenaza para el pueblo Garífuna, al incluir a más de 20 de
las 47 comunidades como áreas de subasta al capital extranjero.
Expresamos nuestro repudio a la tergiversación de la
creación de una Ley de Consulta Previa, como el anteproyecto impulsado
por PNUD y el Estado de Honduras, en la que eliminaron el
“consentimiento”, con el fin de convertir la consulta previa en un
simple formalismo. Las presiones del Programa REDD y la Unión Europea
para la implementación de los proyectos REDD, continúa descalificando a
organizaciones que no están bajo el control de la actual administración
gubernamental.
Observamos como la costa
norte de Honduras se ha convertido en un enorme basurero ante la
inexistencia de políticas publicas destinadas al manejo de los desechos
sólidos. Como prueba, se vienen divulgando vídeos que muestran enormes
islas de basura que flotan a millas de la costa.
El cambio climático afecta a
nuestras comunidades de forma inexorable al mismo tiempo que la erosión
costera devora nuestras playas, siendo notoria la línea alta de la
marea de tormenta que ya afecta a las casas de habitación.
Las mujeres Garífunas
notamos un incremento acelerado de enfermedades de los órganos
reproductivos y cáncer de mama en nuestras comunidades, situación que se
ha agravado en los últimos años.
La pérdida del territorio ancestral y la crisis económica
han generado efectos nocivos en la dieta tradicional Garifuna, la cual
podemos indicar que esta en proceso de desaparición. La adopción de
saborizantes artificiales y la suplantación del dumari -extracto de
yuca- por el cubito, ha generado un aumento en enfermedades
cardiovasculares, entre otras
Demandamos:
Al estado de Honduras cese a
la persecución, criminalización, judicialización y asesinatos de las
defensoras de la madre tierra. Además exigimos justicia para el caso del
homicidio de nuestra hermana Berta Cáceres.
Exigimos al estado de
Honduras la aplicación del Convenio 169 de la OIT en referencia al
reconocimiento de territorio ancestral, ademas de respetar la consulta
previa en relación a programas y proyectos de supuesto desarrollo,
especialmente los que se vienen fraguando para imponer las “ciudades
modelo” (ZEDE), las que se han convertido actualmente en la mayor
amenaza para el pueblo Garifuna.
Las mujeres Garífunas
solicitamos al PNUD y el Programa REDD que tomen nota de las
recomendaciones efectuadas por la Relatora Vicky Tauli Corpus, para así
lograr la creación de mecanismos de consulta previa, en base al espíritu
del Convenio 169 de la OIT y el Declaración de Naciones Unidas sobre
los Derechos de los Pueblos Indígenas.
Exigimos la creación de
políticas públicas destinadas a controlar el uso desmesurado de plástico
y la creación de rellenos sanitarios en las comunidades costeras.
Requerimos de acciones
concretas de respuesta al cambio climático y la erosión costera,
indicando que las acciones efectuadas por las municipalidades no dejan
resultados concretos, de ahí que exigimos la participación comunitaria
directa ante la politización de los proyectos de mitigación y adaptación
al cambio climático manejado desde las municipalidades.
Las mujeres Garífunas
exigimos una solución inmediata a la problemática territorial que afecta
a las comunidades Garifunas la cual se agravó a partir del golpe de
estado de 2009 con la entrega de la costa norte al crimen organizado. La
promoción de las ciudades modelo (ZEDE) ha generado como consecuencia
un incremento de las presiones territoriales y desplazamientos
poblacionales. De ahí que exigimos al Gobierno que se respete el derecho
a la Consulta Previa en cualquier tipo de proyecto o medida legislativa
que pueda afectar a nuestro pueblo.
Las mujeres Garifunas como
protectoras de los territorios y bienes comunes de la naturaleza,
exigimos al gobierno el cumplimiento de las sentencias emitidas por la
Corte Interamericana en el 2015, sobre las comunidades de Punta Piedra y
Triunfo de la Cruz.
Dado en la Comunidad de Vallecito a los 6 días del mes de mayo del 2018
Organización La Esperanza de las Mujeres Garifunas, de Honduras, OLAMUGAH