2012-2014
Ser
defensora en Mesoamérica se ha
convertido
en un riesgo permanente que
amenaza
la vida, seguridad y bienestar tanto de
las
defensoras de derechos humanos como de
sus
colegas, familiares y las poblaciones con las
que
trabajan. Ser amenazada, criminalizada,
sufrir
agresiones y estar en constante alerta es
parte
de su trabajo diario. Enfrentar la violencia
estructural
que prevalece en los países de
la
región y las sistemáticas violaciones a los
derechos
humanos les implica a las defensoras,
a
sus organizaciones y movimientos, un trabajo
complejo,
desgastante y estresante de escucha,
acompañamiento
y exigencia de justicia1.
De acuerdo
a la CIDH “la criminalización
de
las defensoras y defensores de derechos humanos mediante el uso
indebido del
derecho
penal consiste en la manipulación del poder punitivo del Estado por
parte
de
actores estatales y no estatales con el fin de obstaculizar sus
labores de defensa,
así
impidiendo el ejercicio legítimo de su derecho a defender los
derechos
humanos”2
Entre 2012
y 2014 la Iniciativa Mesoamericana de Defensoras (IM-D) registró
un
total de 1,688 agresiones a mujeres
defensoras
de derechos humanos en El
Salvador,
Guatemala, Honduras y México; de
las
cuales 414 corresponden a 2012, 512 a 2013
y
762 a 2014.
Atendiendo
a los 12 principales tipos de agresiones sufridos por las defensoras
ente 2012 y 2014
encontramos
que las seis principales formas en las que se agrede a las mujeres
defensoras son3:
- Intimidación y hostigamiento psicológico, con 21% (351) de las agresiones registradas entre 2012 y 2014.
- Amenazas, advertencias y ultimátum, con 16% (265) de las agresiones registradas entre 2012 y 2014.
- Calumnias, señalamientos y campañas de desprestigio, con 9% (145) de las agresiones entre 2012 y 2014.
- Uso excesivo de la fuerza, con 6% (101) de las agresiones registradas entre 2012 y 2014.
- Detención ilegal y arresto arbitrario, con 4% (71) de las agresiones entre 2012 y 2014.
- Criminalización y judicialización, con 4% (69) de las agresiones registradas entre 2012 y 2014.
En total,
estos seis tipos de violencia representan 60% de las agresiones
sufridas por las defensoras entre los años 2012 y 2014. En
Guatemala y Honduras las defensoras más agredidas son las que
defienden el territorio y los bienes
naturales (40% y 51% respectivamente).
En Honduras, como a nivel mesoamericano, ser una
defensora de derechos humanos es una lucha en sí misma, a la que se
suman las distintas participaciones de las mujeres dentro de los
movimientos sociales que defienden derechos tan fundamentales como el
territorio, el agua, la vida o el derecho a defender derechos. Pero
también existen apuestas desde las mujeres, desde las feministas,
que son impulsadas desde estos movimientos con la esperanza de ser
acuerpadas por otras y otros.
Criminalización
a Defensoras en Honduras 2015-2016
En
Honduras, tener datos exactos sobre defensoras criminalizadas es una
labor aun pendiente, se saben de ciertos casos de defensoras, algunos
emblemáticos, otros recientes, y otras que vuelven a enfrentar
procesos de criminalización. En el 2015 algunos de los casos de
criminalización acompañados por la RNDH más emblemáticos fueron
el de la defensora Liliam Borjas de la Central Nacional de
Trabajadores del Campo (CNTC) criminalizada desde el 2012 por
terratenientes de su comunidad por el supuesto delito de usurpación,
y siendo amenazada y hostigada constantemente por los terratenientes;
un caso que recibió mayor cobertura mediática, se comenzó a
acompañar desde el mes de julio, fue la criminalización al Grupo
Campesino Juan Almendares en Santa María, La Paz donde las
defensoras María
Melecia Hernández, Norma Suyapa Herrera, Zonia Isabel Galeas,
Geraldina Santos Hernández y María Emerita López fueron reprimidas
junto a sus demás compañeros y familiares por fuerzas policiales y
luego privadas de su libertad sin previa investigación, acusadas por
terratenientes del departamento de La Paz por el supuesto delito de
usurpación.
Zonia
Gáleas, Gerardina Santos y Norma Herrera estuvieron privadas de
libertad desde el día 17 de Julio hasta el
21 de
septiembre de 2015. En el centro penitenciario de Márcala se
encontraban en condiciones de hacinamiento; sin asignación de cama
lo que las obligaba a dormir en el suelo; dormían y comían en el
mismo espacio donde están los baños sanitarios; no contaban con
enseres necesarios (artículos personales y de limpieza) para su
diario vivir, y como parte de la condición de precariedad de sus
familias. Además, sufrieron constante discriminación por parte de
las autoridades del centro penitenciario por el hecho de ser
campesinas defensoras del derecho a la tierra, señalándolas como
“usurpadoras y roba tierras”.
Las
defensoras sufrieron severas repercusiones físicas, emocionales,
psicológicas producidas por el desalojo, la captura y la privación
de libertad, María Emerita López, una de las defensoras, se
encontraba en condición de embarazo al momento del desalojo y estuvo
22 días privada de libertad en las condiciones antes mencionadas y
producto de ello tuvo una interrupción de su embarazo. Para las
defensoras y su familias toda esta situación de criminalización y
señalamientos produjo consecuencias económicas negativas en las
familias de las defensoras por el no poder trabajar sus cultivos y
luego con las medidas sustitutivas tienen que viajar a otro municipio
una vez por semana para firmar en los juzgado, lo que les genera
gastos sin tener ingresos como cubrirlos.
Durante
el 2016, hemos acompañado algunos de los cientos de casos de
defensoras criminalizadas, entre ellas Orbelina Flores miembra del
Observatorio Permanente de Derechos Humanos en el Aguán (OPDHA) y
Carolina Castillo de la Organización Fraternal Negra
(OFRANEH).
Orbelina
Flores, ha reportado a la RNDH 6 incidentes durante el 2015, siendo
en su mayoría amenazas y actos de intimidación de vecinos de su
comunidad y miembros cercanos a su organización. Carolina Castillo
ha enfrentado 3 incidentes en el 2015 vinculados a la lucha por la
defensa de su territorio, con actos de intimidación,
hostigamiento psicológico, ataques al patrimonio personal y
amenazas contra su vida.
1Iniciativa
Mesoamericana de Mujeres Defensoras de Derechos Humanos
(IM-Defensoras) “Agresiones Contra Defensoras de Derechos Humanos
en Mesoamerica, Informe 2012-2014. Ver más
http://im-defensoras.org/wp-content/uploads/2016/04/283951300-Informe-2012-2014-de-Agresiones-contra-Defensoras-de-DDHH-en-Mesoamerica.pdf
2Comisión
Interamericana de Derechos Humanos. 2015. Criminalización de
defensoras y defensores de derechos humanos.
3Iniciativa
Mesoamericana de Mujeres Defensoras de Derechos Humanos
(IM-Defensoras) “Agresiones Contra Defensoras de Derechos Humanos
en Mesoamerica, Informe 2012-2014.